viernes, marzo 31, 2006

III

Tu corazón sólo necesita un poco de luz, camina conmigo ángel, y encontremos ese patio de los sueños donde tendidos al sol podamos soñar juntos, duerme bien y que la noche no traiga demonios a tus sueño, que sean hermosos como esos ojos que la vida te regalo.

Esta es la tercera parte de una historia que aún no se ha contado.
II

Entonces un día he de entender que la vida a dejado de ser absurda, que las razones las tengo frente a mi y que gracias a Dios mis sentimientos son más fuertes que esa maldita razón, droga de los hombres.

El miedo que ha entrado en mí, me lo he curado con dos gotas de tus ojos, el frío me lo quito con tus dos hermosas manos, y las ganas de soñar las complemento con tus días perdidos en cada calle que caminas.

Voy recogiendo tus pasos, uno a uno, día por día, me fumo tus palabras que saben a olvido, me sostengo en pie sólo por un día más.

He caminado las calles de tu mano, recordando los pequeños espacios, los instantes que forman la felicidad, aunque sólo sea a ratos, en esporádicas miradas que buscan no mirar, en palabras que se pierden entre tus labios para no hacerte daño.

Ando por esas mismas calles, por esos mismos lugares; por tus ojos, por tu piel.

Antes del fin acércate, escucha lo que tengo que decir, no temas más de lo que yo lo hago, y espera, espera a que llegue, no partas antes del final, no des vuelta, atiende lo que en este momento puede ser.

Aunque no encuentre la manera de llegar, lo intentare, sin importar perder el rumbo en el camino, perdido ya lo he estado, y he aprendido que siempre existe una salida, que siempre hay un mejor mañana, lleno de luz, azul, y limpio.

Acompáñame, conozco un lugar de cielos azules, de mañanas mejores, con una casa de piedra, con paredes muy altas, con un portón de madera enorme, con un patio que se utiliza sólo para soñar, cierra los ojos y déjame llevarte, vamos, lento, crucemos ese portón, el patio nos espera, la tranquilidad se avecina.

No lo sientes? Las cosas van más calmas, el aire sopla pero ya no lastima, estamos a punto de encontrar…
Cuantas cosas, se quedan por decir, cuando ya no entendemos lo que pasa.

Escucha, aún queda un soplo, aún hay una parte que esta viva, ¿la oyes? Sí, presta atención, apenas es un sonido, pero sí, aún hay vida y de eso estoy convencido.

Esta es la segunda parte de una historia que aún no se ha contado.

POR PARTES

I

Cuando las cosas no tienen otro sentido más que el fin, las palabras salen sobrando, y se revuelven las hojas en el aire, los caminos se nublan y de tus ojos ya no brota una lágrima más, tus manos pierden el calor.

Ahora mi casa es fría, absurda como esta vida a la que no entiendo.

Vamos a encontrarnos a mitad del camino; te propongo caminar un paso a la vez, te propongo dejar de ser, para inventarnos, para vivir de nuevo sin tiempos prestados, caminemos hasta donde ya no podamos estar de pie, hasta donde los dolores desaparezcan, donde la realidad se confunde con un beso, donde un abrazo cierre tus heridas.

Camina mi ángel, camino conmigo hasta donde no puedas más, hasta donde tus pies no sean necesarios, hasta donde aprendas a volar, camina compañera, alcánzame a mitad de camino, te prometo que no será en vano.

Ayudémonos a sufrir la vida juntos, enséñame a vivir de corrido, sin paradas no previstas, sacúdete las ganas de encontrarte una vez más.

Ya lo se¡¡ lo has dejado muy claro, pero yo no estoy convencido, lo respeto pero no lo entiendo, me he quedado aquí sentado, a esperar que detrás de las tinieblas venga la luz, a esperar que de alguna manera un día tú me necesites, a que sanes tus heridas.

Te extraño cada día que te veo, te extraño en cada vuelta de esquina, en cada rodar de esta vida cansada, en cada respirar perdido y en cada beso que se pierde en mi almohada por las noches cuando no me vas a visitar, extraño tus ojos y esa manera tuya de mirar, extraño verte a un lado de mi, tus manos y ese mundo en el que me puedo perder, por que viajar en ti significa perderse.

Me sentare, cansado, pero con ganas de verte cada día un día más, caminare a un lado de ti, tan junto que me puedas sentir y cuando estés sola, cuando tu día se acabe y te sientes a verte de frente, una luz que pase por ti me llevara desde donde este para acompañarte.

Vivir? En qué lugar de nosotros eso esta perdido? Vamos, adelante, lento, un paso a la vez, un día solamente y mañana otra vez, dame la mano por favor.

Quiero buscar tu mano, en la calle, en mi casa, en la noche, de mañana, en todos lados donde exista un recuerdo de ti, de tu olor, de tu piel, de tus hermosos ojos, de tu vida, esa vida que quiero compartir y déjame decirte solo una vez más, que quiero darte mi calor, mis ganas de vivir, déjate cruzar la línea que por más delgada que parezca siempre sera la diferencia.

Aunque este es el final… quiero decirte que no hay una relación mal entendida, déjame decirte que nunca te podré olvidar, por que esta es la primera vez.

Déjame tu sonrisa dibujada en la casa, déjame tus ojos para no sentir miedo de noche, déjame tus manos para confiar y saber que todo estará bien, déjame enseñarte que la vida no siempre es igual.

Abre este espacio, abre tus manos y déjame poner las mías sobre las tuyas.

Hay días en que ya no tengo nada que decir, y mis dedos no pueden escribir por si solos, es entonces, cuando solamente me siento a mirarte en silencio sin interrumpir tu mirada perdida, cuando me como tus ojos, cuando te robo un beso sin que te des cuenta.

Perseverar no es lo mismo que insistir, y mientras tanto me cuelo estas ganas de decirte que te extraño.

Esta es la primera parte de una historia que aún no se ha contado.

lunes, marzo 13, 2006

FUE TAN DULCE

Hay veces en que no sabes que fue lo que paso y puedes tardar mucho rato en entenderlo.
Gracias por eso tan dulce, gracias por estar ahi, aunque ninguno sepa exactamente cómo, no me preocupa por que se que cada día cuando me levante voy a ver tus hermosos ojos, y voy a seguir viendo tu hermosa sonrisa.
Gracias por haber sido tú, gracias por entrar en esto que llaman vida, gracias por entrar en mi espacio, gracias por ser ese ángel tan lindo que vino a mis sueños, gracias por ser parte de este viaje que aún no termina.
Gracias por tener esa dulzura en tus manos, gracias por cerrar mis ojos y decirme que todo va a estar bien, gracias por espantar los demonios, gracias por ser tú y por dejarme ser yo.
Gracias por ser una luz, gracias por entender, gracias por esos momentos tan llenos de magia, gracias por lo maravilloso que me has dado, gracias hacer el intento de disfrutar este viaje y hacerlo menos pesado.
Gracias por decirme tus errores, gracias por contarme de tus penas, y sobre todo gracias por que se que todas las cosas pasan por que las queremos, gracias por entender esta vida que apesar de ser tan triste se puede arreglar.
Por todo eso gracias a ti mujer, que seras siempre un bello, hermoso e inmortal recuerdo en mi vida.
No podria decirte todo en letras ni en palabras, solo el tiempo y este viaje te diran lo que significas y significaras. Recuerda que estare aqui y que no es lo mismo insistir que perseverar.
Ahora eres parte importante de este mundo lleno de vida.